Microfinanzas en acción: poner en marcha una empresa de futbolines

En la bulliciosa ciudad boliviana de Cochabamba, Félix Cárdenas está ocupado en el trabajo, dando los toques finales a una mesa de futbolín de color rojo brillante. Él y su equipo han elaborado y pintado cuidadosamente la mesa a mano, utilizando madera de origen local y tallando a los jugadores en miniatura en piezas de motores diesel reciclados.

Mientras se detiene para admirar su creación, Félix reflexiona sobre la primera mesa que hizo en un cobertizo improvisado hace casi 40 años. Su negocio ha recorrido un largo camino desde entonces. Con tres microcréditos sucesivos de nuestra organización socia, Banco Pyme de la Comunidad, él ha creado una floreciente pequeña empresa desde cero, y ahora produce hasta 24 mesas de fútbol cada mes para clientes en todo Bolivia y más allá.

Obtener acceso a financiamiento para su proyecto fue inicialmente una lucha cuesta arriba. Habiendo perdido su trabajo a principios de la década de 1980, Félix estaba decidido a encontrar una manera de mantener a su familia iniciando su propia empresa. Pero asegurar un préstamo de un banco tradicional resultó ser un desafío. Todo cambió cuando se acercó a Banco Pyme de la Comunidad, organización financiada por Oikocredit, que es un banco socialmente responsable y proveedor de microfinanzas.

Banco Pyme comparte el objetivo de Oikocredit de empoderar a las personas para mejorar sus medios de vida a través de finanzas inclusivas. El banco está dispuesto a apoyar a las pequeñas empresas y empresarios en los países en desarrollo, para que tengan las mismas oportunidades de florecer.

Félix invirtió sus microcréditos en las herramientas, los materiales y el equipo que necesitaba para montar su taller, y luego en expandirse para emplear a dos personas más. Banco Pyme lo ha apoyado en cada paso del camino. Su oficial de crédito se reúne con Félix regularmente y desarrolla un profundo conocimiento de su negocio, lo que le permitió ofrecer préstamos que se ajustan a sus requisitos, así como también evaluar su capacidad para realizar reembolsos. Es importante destacar que el banco miró más allá de las finanzas para ofrecer formación de Félix sobre temas importantes, como el desarrollo empresarial y la contabilidad.

De esta forma, Félix consiguió tanto los fondos vitales que necesitaba para establecer su empresa, como un socio comercial y financiero-confiable en quien puede confiar. Hoy, él puede mantener cómodamente a su familia de siete miembros.

Entonces, ¿cómo trabaja Oikocredit con Banco Pyme para apoyar a emprendedores como Félix?

En particular, Oikocredit está ayudando al banco a expandir sus ofertas para empresarios en comunidades rurales. Lo hace de dos maneras: proporcionando una inversión de capital, préstamos y apoyándolos a través de la creación de capacidades en la creación de productos financieros adaptados a las empresas rurales. Oikocredit también comparte las mejores prácticas para medir el impacto social de los préstamos y la mejor forma de administrar el riesgo.

Deseoso de mostrar la artesanía de Félix, Oikocredit llevó la mesa de futbolín roja al Kirchentag 2017 (un evento organizado por la iglesia protestante alemana que atrajo a más de 100.000 visitantes) en Berlín, donde los inversores y otros visitantes pudieron jugar. El equipo y los voluntarios de Oikocredit disfrutaron contarle a la gente la historia detrás de la mesa. Mientras tanto, a unas 6.500 millas de distancia en Bolivia, Félix estaba encantado de saber que su primera exportación a Europa había demostrado tanto éxito.